✪ Aprende a coger bien el volante con unos sencillos pasos

Sostener correctamente el volante de tú coche es una importante precaución de seguridad que debes tener en cuenta siempre que decidas conducir.  Los conductores que usan la técnica correcta para coger el volante tienen menos probabilidades de tener un accidente de tráfico. Reaccionarán más rápido ante imprevistos y podrán usar su vehículo de manera más eficiente.

Estadísticas han mostrado, cómo muchos de los accidentes que se producen en una salida de carretera han sido motivadas por colocar mal las manos sobre el volante. Los conductores más experimentados deben ser conscientes de la postura, la posición del cuerpo y la colocación de las manos mientras se conduce. Porque llevar muchos años haciendo lo mismo “porque nunca ha pasado nada”, no significa que esté bien hecho. Es un mal hábito.

Personalizar nuestro puesto de conducción

Cuando te sientes cómodamente en tu vehículo y ajustar el reposacabezas, el asiento y los espejos retrovisores de tal forma que se adapten a tu altura, también debes ajustar el volante. La mayoría de los modelos permiten mover la columna de dirección hacia arriba o hacia abajo utilizando una palanca o manija ubicada debajo del volante. 

Posición de las manos sobre el volante

La técnica para la colocación correcta de las manos en el volante ha cambiado drásticamente a lo largo de los años, pero se puede describir con más facilidad en términos relacionados con la hora de un reloj. La Dirección General de Tráfico considera que la posición adecuada está a las 10:10, aunque las 9:15 también es aceptado. Como se indica la hora y los minutos, tenemos que usar tanto la mano derecha como la izquierda. Estas recomendaciones son flexibles, pero ten en cuenta que ya no se recomiendan las 2:10, ya que puede ser peligroso en vehículos con volantes más pequeños equipados con airbag.

Cómo manejar el volante

Mientras conduzcas, nunca debes quitar ninguna de tus manos del volante. El método de tirar y empujar a la hora de girar el volante permite manejarlo con garantías de reacción mientras mantienes ambas manos en contacto con el aro. Veamos cómo se hacen las cosas bien. Por ejemplo, si estás girando hacia la derecha, empujarás el volante en el sentido de las agujas del reloj con la mano izquierda y, al mismo tiempo, tirarás del mismo con la mano derecha. Algunos conductores, simplemente, empujan el volante con la mano opuesta a la dirección en la que están girando mientras permiten que el otro lado del volante se deslice a través de la otra mano, sin ninguna sujeción firme .

Concienciarse de que podemos recibir una multa

Puede que haya muchas formas de coger el volante, pero solo hay dos formas correctas. Las demás, incluso pueden ser castigadas por el brazo de la ley. Dicta el Reglamento General de Circulación que: «Se deberá conducir con la diligencia y precaución necesarias para evitar todo daño, propio o ajeno, cuidando de no poner en peligro, tanto al mismo conductor como a los demás ocupantes del vehículo y al resto de los usuarios de la vía. Queda terminantemente prohibido conducir de modo negligente o temerario«.

Conclusiones

No hay que olvidar que nuestro único contacto con el coche son el asiento, los pedales y el volante, y optimizar esa comunicación es crucial para un buen control del vehículo.  A través del volante no solo le decimos al coche lo que queremos que haga, sino que nos transmite (en mayor o menor medida, según el coche) lo que hacen las ruedas. Otro factor inherente a la hora de hacer un buen uso del volante es la velocidad de actuación y la ergonomía. Es una premisa coger el volante de tal manera que podamos hacer giros rápidamente y con el mejor control posible, eliminando así posibles sustos. Coger bien el volante es esencial para conducir un vehículo de manera segura