
Un accidente de tráfico constituye siempre una situación compleja y estresante. Además de hacer frente a los daños materiales y a las lesiones causadas, las víctimas muchas veces ven afectadas a mediano y largo plazo sus capacidades mentales y físicas debido a las secuelas que devienen de los siniestros.
En ese contexto, es importante conocer cuáles son esas secuelas que pueden afectar a una víctima de accidente de tráfico, así como de qué forma son valoradas y cómo afectan el desenvolvimiento de los lesionados.
¿Qué son las secuelas y cómo se valoran?
Una secuela es el resultado negativo, en este caso lesión o enfermedad, que puede sobrevenir como consecuencia de una acción o hecho determinado.
Específicamente, cuando una persona sufre lesiones en un accidente de tráfico, independientemente de su gravedad, éstas pueden traer a su vez consecuencias que van desde limitaciones o problemas orgánicos y físicos hasta sensoriales e intelectuales.
Hay secuelas cuando, una vez que la víctima de un accidente obtiene el alta médica o la estabilización de las lesiones, continúa con limitaciones, dolores o perjuicios estéticos.
Así de amplio es el espectro de las secuelas, las cuales pueden afectar, por un lapso de tiempo a veces indeterminado, la vida y el desempeño del lesionado.
En el marco legal español encontramos el concepto de secuelas en el artículo 93 de la Ley reforma del sistema para la valoración de los daños y perjuicios causados a las personas en accidentes de circulación:
“Deficiencias físicas, intelectuales, orgánicas y sensoriales y los perjuicios estéticos que derivan de una lesión y permanecen una vez finalizado el proceso de curación”.
Por otra parte, cuando el siniestro deriva en secuelas muy graves para la víctima, éstas no solo la afectan a ella, sino por extensión a todo su núcleo familiar.
Esta situación puede agravarse en aquellas situaciones en las que el lesionado no puede valerse por sí mismo, y termina perdiendo su autonomía. Un caso frecuente cuando las secuelas revisten de una gravedad tal, que hacen necesario que la persona cuente con asistencia para realizar sus actividades regulares, obligándole a ser constantemente atendida por un tercero.
En cualquier caso, y sea cual sea el tipo de secuela, un perito médico experto en lesiones corporales, es quien tiene la capacidad y experiencia para evaluar a cabalidad la salud del lesionado, y poder determinar y valorar sus secuelas.
¿Qué son secuelas concurrentes?
Cuando las secuelas fueron provocadas en un solo accidente de tráfico, pero no afectan una misma área del cuerpo, estructura orgánica u objeto funcional, se habla de secuelas concurrentes. Este tipo de secuelas están tipificadas en el artículo 98 del Baremo de tráfico.
Podríamos citar como ejemplo, un siniestro de circulación que cause lesiones en una víctima en distintas áreas del cuerpo que, posteriormente, devienen en secuelas que se manifiestan en lugares tan disímiles como lo brazos, las piernas y la cervical.
Ahora bien, cuando una persona sufre varias secuelas en un siniestro, se utiliza la fórmula de Balthazar, también conocida como fórmula correctora para lesiones concurrentes.
[[(100 – M) x m] / 100] + M
Para entender en términos sencillos la aplicación de esta fórmula, se deben establecer los valores. La M mayúscula sería la secuela de mayor puntuación de las concurrentes, y la m minúscula la de menor valor.
Esta fórmula es un instrumento utilizado por los abogados especialistas en accidentes de tráfico para calcular la indemnización por secuelas que corresponde a su representado.
La ecuación permite poder evaluar la forma en que varias y diferentes secuelas reducen las capacidades físicas y mentales de la víctima, lo que se refleja en el monto final por secuelas que recibirá el lesionado como parte de la Indemnización por accidente de tráfico que le corresponde.
¿Qué se consideran secuelas intergravatorias?
Se habla de secuelas intergravatorias cuando un mismo accidente de tráfico produce más de dos secuelas que afectan funciones comunes, generando con ello un daño aún mayor, y agravando en consecuencia las dolencias de la víctima, haciéndolas más significativas.
El artículo 99 del Baremo de Tráfico tipifica este tipo de secuelas.
Por ejemplo, si una persona es lesionada en un accidente de tráfico, y en consecuencia pierde la audición, su afección será más grave y significativa si pierde por completo la audición, no solo en un oído, sino en ambos.
Ahora bien, existen criterios claramente definidos para poder considerar las secuelas como intergravatorias, a saber:
- Que un mismo accidente de tráfico produzca dos o más secuelas que afecten la misma parte del cuerpo.
- Que estas secuelas afecten la misma estructura orgánica o función.
- Que dichas secuelas hagan más graves y significativas las consecuencias en la víctima.
¿Cuáles son las secuelas intergravatorias de estado previo?
Como su nombre lo indica, las secuelas intergravatorias de grado previo, describen a aquellos casos en los que existía una condición o afectación de salud anterior al accidente de tráfico, que se ve agravada significativamente como consecuencia del siniestro.
Al haber una condición preexistente, este tipo de secuelas debe ser valorada de manera distinta a como cuando se presentan en una persona sin una afectación de ningún tipo.
Por ejemplo, si previo al siniestro la víctima tenía problemas de audición y, a consecuencia del incidente de circulación, termina por completo la capacidad de oir, estaremos hablando de secuelas intergravatorias.
La evaluación de este tipo de secuelas suele ser muy compleja, y debe ser un perito médico experto quien se encargue de evaluar a la víctima, y determinar la valoración que se le deben dar.
Preguntas frecuentes
Son muchas y muy variadas las secuelas que pueden presentarse en una víctima de un siniestro de circulación. En este sentido, pueden surgir muchas dudas en los lesionados al momento de interponer su reclamación por indemnización por accidente de tráfico.
Tomando lo anterior en consideración, se presentan a continuación algunas de las preguntas que se presentan más frecuentemente, con sus respectivas respuestas.
En cualquier caso, es recomendable para cualquier víctima de accidente, y en especial aquellas que presenten secuelas, contar con la asistencia profesional de un abogado especialista en accidentes de tráfico, quien le guiará para obtener la justa compensación a la que tiene derecho por sus lesiones.
¿Cómo se determina la indemnización por secuelas?
Para determinar las indemnizaciones por accidente de tráfico que corresponden a las víctimas por las secuelas, se usan unas tablas que son actualizadas cada año por el Ministerio de Hacienda.
Las mencionadas tablas consideran factores como la edad del lesionado, y muestran los montos máximos y mínimos correspondientes por indemnización por cada secuela.
Los abogados especialistas en accidentes de tráfico tienen el conocimiento y la experiencia para calcular la indemnización correspondiente a la víctima, mediante un sistema de puntos que figuran en las mencionadas tablas, conocidas como baremo.
¿Puede una víctima con secuelas de un accidente de tráfico optar al lucro cesante?
Suele presentarse de manera bastante frecuente que los lesionados en un accidente de tráfico se vean imposibilitados para ejercer sus labores habituales, en el periodo en el que se recuperan de sus heridas y posteriores secuelas.
Evidentemente, esa persona deja de recibir pago por su labor, complicando aún más su situación, ya de por sí estresante.
Ahora bien, el marco legal español contempla el derecho de los lesionados a cobrar en esos casos una indemnización adicional, correspondiente al ingreso que la víctima deja de percibir por las afectaciones del siniestro. Este monto se determina estableciendo como base los ingresos previos del lesionado.
En estas situaciones buscar la asesoría de un abogado especialista en accidentes de tráfico es muy importante, pues éste cuenta con el conocimiento y la experiencia para asegurar que el lesionado no pierda ninguno de los beneficios a los que tiene derecho por ley.